Hola, que tal, te saluda Arturo García.
En los últimos artículos hemos hablado sobre como manejar el miedo, de hecho han sido los 9 artículos anteriores que hemos dedicado a conocer opciones para manejar el miedo; en esta ocasión quiero platicarte una experiencia que me toco vivir esquiando.
Hace poco tuve la oportunidad de ir con unos amigos a esquiar y para mi fue una experiencia nueva, nunca lo había hecho antes, fue muy divertido, pero al inicio me enfrente a miedos muy grandes, te explico, cuando estas abajo en la montaña y me puse los esquíes, estaba todo muy bien, estaba contento, sonriendo con buena expectativa y emoción. Y entonces, cuando llega el carrito que nos lleva arriba de la montaña, me empezó la sensación de miedo; desde el carrito pude ver a las personas que van esquiando montaña abajo y me di cuenta que íbamos tomando bastante altura y que la montala era grande!
Siguió subiendo el carrito, y ya para este punto era muy claro que estaba sintiendo miedo, y pude identificarlo como miedo a lo desconocido, no sabía que iba a pasar; de inmediato empece a preguntar ¿como te bajas del carrito? porque los carritos no se detienen, siempre están avanzando; me explicaron y eso me dio un poco de tranquilidad.
Al aproximarnos al lugar donde teníamos que bajarnos, prácticamente tienes que brincar del carrito antes de que el carrito de vuelta, si no te bajas, vas de regreso sentado en el carrito. Cuando el carrito se acerco al punto donde teníamos que bajar, dimos un pequeño salto y bajamos a una zona donde te preparas para bajar esquiando.
Hasta este punto todo iba muy bien, estábamos ya en el área de preparación y entonces llegó una parte muy interesante para mi, volteo hacia el área donde esta la bajada de la montaña, y vi las personas como puntitos, me di cuenta que estaba muy alto, también vi que la inclinación de la montaña era bastante. En este momento me invadió aún mas el miedo, nunca había esquiado y pensaba ¿como lo voy a hacer?
En este punto, mis amigos me empezaron a explicar (ellos si tienen mucha experiencia esquiando), y aunque no pretendo darte una lección sobre como esquiar, si te explico esta parte, vas a entender lo que sucedía en mi.
Sucede que si colocas los esquíes paralelos entre si, con las rodillas un poco flexionadas, vas a avanzar hacia adelante; si quieres frenar tienes que abrir un poco los esquíes (separando los talones y acercando la punta del pié) y el pie hay que hacerlo un poco hacia adentro, es decir, levantar un poco la parte externa del pié. De esta manera se crea un freno, aunque hay otro requisito importante: se tiene que inclinar el peso del cuerpo hacia adelante; suena sencillo, ¿no?
Me decían mis amigos, «si quieres detenerte, abres un poco los pies, levantas la parte externa del pié y te inclinas hacia adelante».
Te voy a platicar como fue mi primer bajada: prácticamente cada 10 metros estaba en el piso, y lo que sucedía era lo siguiente, yo entendía las instrucciones, me quedaba muy claro en mi mente, y de hecho, mis amigos me estaban repitiendo constantemente que hacer y era muy claro para mi, pero lo que sucedía era que cuando empezaba yo a tomar un poco de velocidad (que no era mucha, pero era algo nuevo para mi), me daba cierto miedo (sobre todo al ver la bajada), yo pensaba «si tomo suficiente velocidad, no se si me voy a detener».
Entonces, cuando quería detenerme, seguía las instrucciones, colocaba los esquíes en forma de V, levantaba la parte externa del pié y sabia que el tercer paso era lanzar el cuerpo hacia adelante, eso me va a frenar, pero cuando yo empezaba a lanzar mi cuerpo hacia adelante, sentía el vértigo de la montaña de ver la bajada, por lo que mi primer reacción física era hacer mi cuerpo hacia atrás y sentarme. Aunque mi instrucción mental era lanzar el cuerpo hacia adelante, yo sentía que si lanzaba el peso de mi cuerpo hacia adelante, no me iba a detener, y como reflejo, enviaba mi cuerpo hacia atrás. Sabía las instrucciones, en mi mente estaban muy claras, pero no era fácil de controlar la reacción del cuerpo
Lo que sucede cuando lanzas el cuerpo hacia atrás (al querer frenar), es que la punta de los esquíes se levanta y entonces no hay forma de frenar mas que cayendo al piso, ya que no hay agarre de los esquíes con la nieve.
Yo creo que pase como 3 o 4 horas tratando de entender físicamente este concepto, mentalmente si lo creía, pero cuando el miedo me invadía venía una reacción física que no podía coordinar adecuadamente. Veía la montaña hacia abajo y me llenaba de miedo.
Mis amigos tenían ya mucha experiencia esquiando, y yo estaba acompañándolos, por lo que yo no empece mi práctica con una montaña pequeñita, estaba en la montaña donde ellos regularmente van a esquiar, ellos me decían «es seguro, estas con nosotros», pero para mi si era impactante el tamaño de la montaña y la bajada. Me pase en el piso al menos las primeras 3 horas. Empece de día con luz, y finalmente, cuando empece a sentir la confianza y a vencer el miedo, (y sobre todo el miedo físico que me detenía de hacer lo que yo quería).
Todo este tiempo estuve trabajando para vencer este miedo y tratar de disiparlo, de tal manera que el miedo no me invadiera, ya que me impedía en este caso sentir la confianza de frenarme. Y todo se resumía en que me era difícil lanzar mi cuerpo hacia adelante.
Cuando me di cuenta que esquiar era mucho como participar en la vida, me ayudo mucho para mejorar, y lo que yo encontré es que para vencer el miedo tenía que confiar, ¿confiar en que? no solamente en las instrucciones, que me habían dado de como esquiar y como detenerme; también tenía que confiar en mi, y en este momento que empezó a crecer la confianza y entregarme, fue mucho mas sencillo elegir mi rumbo y frenar, pude manejar el miedo, ya no era el miedo el que me manejaba.
Finalmente, ya de noche, después de varias horas, logre hacer un recorrido bastante bueno, no digo que soy experto esquiando, pero logre hacer un recorrido sin caerme y confiando, dándome cuenta que para tener mejor control de los esquíes, si necesitaba lanzar mi cuerpo hacia adelante (aunque el vértigo y la sensación física son de miedo), había que vencer ese miedo, y en este caso, esquiar se vuelve mucho mas sencillo.
Y yo hago la comparación con la vida cotidiana, es exactamente lo mismo, tenemos que lanzarnos hacia adelante, enfrentar nuestros miedos; es importante identificar nuestro miedo ¿a que le tengo miedo? ¿a lo desconocido? ¿a la anticipación de lo que puede suceder? Identifícalo, fluye con el miedo, no permitas que te paralice, yo estaba lleno de miedo las primeras vueltas que di en la montaña pero no deje que me paralizara, luego de cada caída, me levantaba y avanzaba otros 10 metros, etc.
La actitud de fluir con tu miedo y no esperar a que solo desaparezca, sino enfrentarlo, es importante.
Así como para esquiar es importante lanzar tu cuerpo hacia adelante y seguir practicando, en la vida encuentro que es exactamente lo mismo, necesitas confiar, necesitas entregarte en la vida, lanzarte, vencer tus miedos y gradualmente la confianza y la fe van apareciendo.
Quise compartir contigo esta experiencia que tuve al esquiar hablando justamente de este tema sobre el miedo. Espero sea benéfico, déjame tus comentarios abajo de este vídeo.
Te invito a suscribirte a este blog del lado derecho, que tengas buena semana!
Namaste
simplemente gracias… es cierto que estamos todos conectados, hoy me has ayudado y hecho recordar cosas que se van olvidando…
Saludos Jessica,
gracias por tu comentario,
que tengas buen día
Namaste
hola que tal? muchas gracias por esa historia esta bueno!
sabes que tengo ataques de panico muy fuertes y estoy encerrado en casa porque me da miedo salir porque me mareo claro que es porque hace dias que estoy encerrado y al salir tengo sensación de que todo es muy grande y me mareo luego de un rato fuera se me pasa pero realmente tengo miedo a salir y tengo que salir de la casa para poder generar dinero
tenes algun ejercicio para poder superar mi miedo?
muchas gracias!
alex
Saludos Alex,
te invito a visitar mi blog, ahí encontrarás ejercicios físicos y de respiración que te pueden ser útiles,
también te invito a ver la serie completa de «Liberate del miedo» ahí encontrarás recomendaciones para
manejo de emociones, (no solo el miedo).
Espero te resulte útiles,
espero tus comentarios,
buen día!
Muchísimas gracias Arturo. Me ha encantado tus vídeos!!. Sobre todo porque lo explicas de un modo claro y sencillo, fácil de entender.
Actualmente, hago unos talleres antiestrés para padres y madres. Me he permitido enseñar tus ejercicios de respiración bajo tu nombre y estan encantados, porque son muy efectivos. Muchísimas gracias de nuevo.
Si alguna vez vienes por España y das alguna charla o curso, me encantaría poder asistir.
Un abrazo,
Namasté.
Saludos Macrina,
Que gusto te estés impartiendo talleres antiestrés, muy buena labor, te felicito.
Saludos hasta españa, que tengas buena semana.
un abrazo también,
Namaste
HOLA ARTURO, ESTOY MUY AGRADECIDA POR TUS ENSEÑANZAS ME HAN SERVIDO DE MUCHO Y ESO QUE ES MUY POCO LO QUE HE VISTO .
QUISIERA SABER COMO ENFRENTAR LA INSEGURIDAD Y LA PEREZA , SOY UNA PERSONA CON MUCHOS DEFECTOS Y QUIERO EMPEZAR A CAMBIARLOS.
GRACIAS DE CORAZÓN.
Saludos Ana Maritza,
gracias por tu comentario,
considero que no hay una sola respuesta para mejorar internamente ya que depende mucho de cada persona,
pero te puedo recomendar la practica de yoga y meditación como un camino importante para trabajar internamente,
te invito a visitar el siguiente enlace, espero sea útil en tu camino:
http://arturogarciaolivera.com/detalles-nivel1/curso-yoga-para-principiantes/