Hola! te saluda Arturo García,
En este artículo quiero dar continuidad al articulo anterior (http://arturogarciaolivera.com/blog/?p=33), en el cual hablábamos de los propósitos y en esta ocasión quiero hablar sobre que es lo que consigues cuando logras tu propósito.
Hay una diferencia muy grande entre «lograr algo para ser feliz» y «felizmente lograr algo», parece lo mismo, pero hay una diferencia muy grande. En la primera opción tienes que lograr primero el propósito para lograr alegría y conseguir bienestar, pero en la segunda opción que te planteo, es que durante el proceso, estas logrando justamente esa alegría y bienestar, y ya sea que lo consigas o no, pero no te pierdes el proceso.
Te voy a dar un ejemplo, si tu fueras a ir de vacaciones y ya tuvieras todo listo, imagina que vas a salir a la playa, e imagina que ya quisieras llegar, estas ansiosa(o) por llegar pronto, ya quieres estar ahí; que sucedería si a la mitad del camino tu coche se descompone y no logras llegar a tu destino, seguramente ibas a experimentar mucha frustración, ¿porque? Porque no conseguiste llegar tu destino, pero tampoco disfrutaste el camino que si recorriste.
Veamos ahora otra situación, imagina que vas a ir de vacaciones y vas a ir a la playa también, te preparas y tienes ya todo listo, sales en dirección a la playa y empiezas a disfrutar cada momento de tu recorrido, obviamente deseas llegar a tu destino, pero no te pierdes cada parte del camino, cada parada que haces y cada lugar por el que pasas; vamos a suponer que también tu coche se descompone y tienes que regresar a tu casa. ¿Que sucede en este segundo ejemplo? El proceso (hasta donde llegaste) no te lo perdiste, es decir, tu felicidad o tu bienestar no dependía de lograr el propósito final, estuviste experimentando alegría y bienestar mientras estabas en el proceso, independientemente si lograste o no el objetivo final.
Por eso te decía que parece lo mismo, «lograr algo para ser feliz» y «felizmente lograr algo».
La invitación que yo te hago es que te entregues al proceso, y disfrutes el proceso de las cosas y puede ser que logres o no tu propósito. Si solamente te enfocas en el propósito y no lo logras, vas a tener mucha frustración, tristeza o enojo, es decir, las emociones te van a dominar.
Pero si te enfocas en el «proceso», (lo cual no significa no poner todo tu empeño y enfoque hacia tu propósito, da lo mejor de ti), pero si vas disfrutando cada parte del proceso, independientemente si lograste o no tu propósito, vas a haber experimentado alegría, paz y el gusto por tus acciones y la vida misma.
Te invito a que reflexiones en como realizas tus actividades en la vida cotidiana, ¿estas haciendo actividades por el objetivo final? ¿estas enfocando tu alegría y bienestar solo al conseguir la meta? o por otro lado, como es la invitación que te hago, entrégate al proceso y disfrútalo, y felizmente logra las cosas.
Comparte este artículo con quienes creas que les pueda ser de utilidad, espero que a ti te sea de utilidad, deja tus comentarios abajo en el blog.
Te deseo que tengas muy buen día, muy buena semana,
Namaste!
Muchas gracias Arturo:
Reflexionar sobre el difrute del viaje hacia el objetivo es interesante, vivirlo realmente es emocionante, lo estoy experimentando, es la manera de vivir intensamente el presente dejando el futuro de lado, «No te inquietes por el mañana, él traerá sus propios problemas» Esto es bíblico.
Nuevamente, muchas gracias.
Namaste
hola muchas gracias por este artículo ,me senti muy identificada,porque yo siempre
estoy enfocada en el resultado.bay
Saludos Karla,
gracias por tu comentario, que tengas buen día!!
Hola Arturo, espero te encuentres bien. Gracias por compartir esta información, a veces es algo que ya sabemos pero se nos olvida, y es necesario que alguien nos recuerde nuevamente disfrutar el camino al igual que disfrutar el destino.
Namaste
Saludos Alberto,
gracias por tu comentario!
Buen día Arturo , gracias por el artículo.
Encontrar algo disfrutable en cada momento o situación que se nos presenta en el camino nos enriquece la vida y nos amplia la visión para lograr nuestras metas. El reto es reconocer esa capacidad y ponerla en práctica día con día.
Saludos Tere,
es cierto, es un reto, y al intentarlo va resultando cada vez mas sencillo
hasta que se convierte en parte de nuestros habitos.
buen día!
Me he sentido identificada con el tema soy muy ansiosa y siempre espero el final; me hiciste recordar cuando en mi infancia nos llevaban a pasear y si se presentaba algún inconveniente me moría de la rabieta que me daba. No controlaba mis emociones y todavía tengo que aprender a controlarlas.
Namaste
Saludos Ana Maritza,
gracias por tu comentario,
el manejo de emociones es algo que resulta muy útil aprender,
que tengas buen día!